La fundación por las enfermedades cerebrales buscaba un diseño moderno y serio por lo que se creó el imagotipo bajo esas premisas.
El color azul del logotipo aporta alegría que contrasta con la sobriedad del gris, color, a su vez, de las enfermedades cerebrales. Estos colores se combinan con una tipografía sans-serif, que refleja modernidad, pero con la seriedad que requiere la fundación.